Me embarga la tristeza
Hoy desperté con síntomas
de sentirme un pigmeo
en este infinito
universo,
Siento flotar en el aire,
sin alas, sin poder respirar,
penar en mi alma, no puedo superar,
algo me falta, no es donaire.
Ayer gravité en la vida,
de aquel camino en plena subida,
sentía que para mí no había cabida,
por eso me senté en una piedra habida.
Hoy camino como en la nada,
o como el pez que en el agua nada,
en compañía de la señora tristeza,
quien por el hombro me abraza.
Al portal del olvido llegué,
con ella que bien supo guiarme;
claro que siento algo de escalofrío,
porque nadie más sabrá de mí.
Me embarga la tristeza,
porque soy uno más de su colección,
y ante esta cruel acción,
de mí se esfuma la ilusión.
Te confieso, y es que no soy feliz,
por eso floto en el aire,
como un ave sin alas,
ni quien en su corazón me cobije.
No hay comentarios:
Publicar un comentario